Mensaje: Confiar en Dios sin titubear. Como Edit Stein, Santa Teresa Bendecida por la Cruz, queremos agarrar a Jesus.

Este fin de semana llegamos a la homilia final de nuestra serie: Confiar sin Titubear. Comenzamos con santos de los siglos diecisiete y siete: Lorenzo Ruiz y Beda. Despues nos movimos al signo veinte: San Juan Pablo - llamado "Hombre del Siglo" porque eficazmente lucho contra nazismo y comunismo. La semana pasada vimos a un hombre joven que el inspiro - el Beato Jerzy Popieluszko - un sacerdote diocesano que tuvo un papel clave en derrumbar el comunismo.

Nuestra santa final, como el Beato Jerzy, murio en Polonia como martir - en su caso matada por los Nazis. Sus nombre es Edit Stein. Nacida en Silesia (Alemania) en 1891, Edit era la menor de once hijos. A pesar ser criada en un hogar judio practicante, como adoloscente ella dejo de creer en Dios - pero no dejo de buscar. Cuando entro en la universidad, se echo al estudio de filosofia.

Tal vez la filosofia centrada en la persona humana preparo la tierra, pero en el verano de 1921 (ella tenia 29 anyos) las cosas cambiaron radicalmente. En una biblioteca ella encontro la autobiografia de Santa Teresa de Avila. La agarro profundamente y paso toda la noche leyendola. Al levantar el sol, ella fue convencida de la realidad de Dios - y de Jesus y su Iglesia. No era una etapa transitoria. Edit seguia leyendo y rezando. En seis meses - con un gran costo personal - ell recibio bautismo y entro en la Iglesia Catolica.

Para los nazis no importaba que se hizo cristiana. Odiaban a los judio no tanto por su religion sino por su "raza." Cuando los nazis empezaban a perseguir a los judios, Edit podia haber ido a American como la mayoria de su familia. Pero no lo hizo; entro en la Hermanas Carmelitas y llego a un convento en Holanda. Cuando los nazis se apoderaron ese pais en 1940, inscribieron a todos los judios, incluyendo a los que se hicieron cristianos. Los obispo holandes protestaron publicamente la persecucion de los juios. El 20 de julio de 1942, leyeron una carta de todos los pulpitos catolicos.

Dentro de 2 semanas los nazis respondieron por arrestar a todos los catolicos judios - incluyendo a sacerdotes y hermanas. Llegaron al convento de Edith Stein - ya Hermana Teresa Benedicta de la Cruz. Su hermana, Rosa, tambien estaba alla como carmelita del tercer orden. El Gestapo les dio treinta minutos para juntar ropa y comida para tres dias. Edith estaba tranquila, pero Rosa agitada. Una de las hermanas carmelitas escucho a Edith Stein decir, "Komm, wir gehen für unser Volk!" Ven, Rosa. Vamos para nuestro pueblo. Despues de formalidades burocraticas, fueron puestas en un tren para Auschwitz. El Padre Roberto Barron narra como en una parada alguien reconocio a la Hermana Teresa. Dijo, "Vamos al Este." El 9 de agosto de 1942, Edith, su hermana, Rosa y unos cien otros judios catolicos de Holandia fueron matados. Sus cenizas estan sepultadas en un entierro comun.

Con Edit Stein concluyo esta serie de homilias. He guardado lo mejor hasta el final. Edit Stein - ya conocida como Santa Teresa Bendicida por la Cruz - da un testimonio impresionante a la confianza en Dios en medio de la confusion, odio y sufrimiento terrible. Confiar sin titubear. Mientas hacemos la transicion al mes de noviembre, les pido recordar sus palabras, "Ven, vamos para nuestro pueblo." Y la frase sencilla, "Vamos al Este." El Este es Belen donde experimentamos el nacimiento de Jesus. El Este es Galilea donde escuchamos las ensenyanzas y milagros de Jesus. Sobre todo, el Este es Jerusalen donde Jesus murio por nuestra maldad y triunfo sobre la oscuridad y muerte.

Vamos al Este. Vamos para nuestro pueblo. Este anyo tenemos una oportunidad unica. Dos fiestas importantes cayeron en el dia domingo: la proxima semana Todos Los Fieles Difuntos y el 9 de noviembre la Dedicacion de la Basilica de Letran. Esa dos fiestas hablan de solidaridad - una palabra importante al Beato Jerzy y San Juan Pablo. Edit Stein vivio solidaridad: por su vida de oracion contemplativa y su muerte para su pueblo. No solamente el pueblo judio, sino tu y yo quienes en Cristos somos ramos injertados al arbol judio.

Si, vamos al Este - el Este verdadero. Como dice San Pablo hoy, hemos abandonado los idolos para servir el Dios vivo. Y Jesus nos dice que ese servicio incluye el amor a Dios con el ser entero y amor al projimo por amora a Dios. Confiar. Confiar en Dios. Confiar en Dios sin titubear.

Como Edit Stein, Santa Teresa Bendecida por la Cruz, queremos agarrar a Jesus: "mi roca, mi alcazar, mi libertador, refugio mio, escudo mio...Viva el Senor, bendita sea mi Roca." Amen.

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