La Eucaristía Va Por Medio De Todo

(Homilia Para el Cuerpo y la Sangre de Cristo)

El Padre Bruce Neili describe esta escena en la intersección de una ciudad: En una esquina un joven muestra sus músculos mientras un muchacho débil lo mira. Detrás de ellos hay una señora consumiendo su segundo helado. A la otra esquina, mientras el dueño de la tienda cuenta su dinero, su ayudante descansa en una silla y otro joven mira a las revistas. Un chofer toca su claxon varias veces. El semáforo cambia a verde y un ministro de eucaristía lleva la sagrada comunión a un asilo de ancianos.

Las personas en la intersección representan los siete pecados capitales. El joven fuerte, la soberbia; el débil, la envidia; la señora, la gula; el dueño, avaricia; su ayudante, pereza; el joven con las revistas, lujuria y el chofer impaciente, la ira. Pero lo importante no es tanto los pecados, sino el hecho que la Eucaristía va por medio de todo. Así es en nuestras vidas. Los pecados capitales siempre nos molestan. Venimos a la misa como personas heridas – y hemos herido a otros. Sin embargo, la Eucaristía va por medio de todo.

En las lecturas de hoy vemos como Dios ordenó la historia de salvación a la Eucaristía. Comenzando con Abraham (dos mil años antes de Cristo) hay una figura misteriosa llamada Melquisedec. Abraham le da diez por ciento de sus bienes. Pero lo que más impresiona es la ofrenda de Melquisedec – no un toro ni una oveja, sino los elementos sencillos de pan y vino. (Gen. 14:18)

San Pablo nos cuenta como Jesús, la noche antes de morir, tomó los mismos elementos y los transformó: “Esto es mi cuerpo…esto es el cáliz de mi sangre.” Y da lo que se puede decir es el mandato más obedecido, “Hagan esto en conmemoración mia.” Desde los primeros días cuando los cristianos se reunieron para la “fracción del pan” (Hechos 2:24; 20:7; 27:35; I Cor 10:16) hasta las misas ofrecidas hoy por más de cuatro cientos mil sacerdotes, ¿Hay un mandato más obedecido que, “Hagan esto en conmemoración mia”? (I Cor 11:14; cf. Lc 22:19)

En el evangelio de hoy, Jesús multiplica los panes, pero lo que perdura son sus acciones: “toma…bendice…parte….da.” (Lc 9:16) Vemos los mismos gestos en la Ultima Cena y también en una pequeña aldea llamada Emaús. Después de partir el pan, Jesús desaparece porque ya tiene un nuevo modo de presencia física. (Lc 24:31)

Ahora podemos entender porque la Eucaristía ha durado por veinte siglos. No es por ser un rito excitante como en las religiones paganas. Y sus celebrantes no siempre somos de primera calidad. La única cosa que explica su difusión increíble es su origen. A causa de él, la Eucaristía va por medio de todo.

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Versión Inglés

De los Archivos:

Homilía 2013: Coherencia Eucaristica (Ciclo C)
2012: Posesion Mas Preciada (Ciclo B)
2011: Haciendote Pasar Hambre (Ciclo A)
2010: Por Que Tengo Que Ir a la Misa? (C)
2009: Que Les He Dado? (B)
2007: El Pan de Cada Dia (C)
2006: Lenguaje del Cuerpo (B)
2005: Reverencia Para La Eucaristía (A)
2004: ¿Comunión Para Kerry? (C)
2003: Adorar el Cuerpo y la Sangre (B)
2002: Pan Partido (A)
2001: La Eucaristía Va Por Medio De Todo (C)

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